La semana pasada un compañero gestor de fondos me trasladó su convencimiento en diferentes ocasiones de que las ventas que estamos viendo en los mercados de valores son principalmente “técnicas”, pero que no deberíamos preocuparnos excesivamente por ellas ya que los “fundamentos” siguen siendo fuertes. Ante su insistencia yo le pregunté qué es exactamente una venta técnica, ya que nunca he visto una orden de venta con la palabra “técnica” en ella. Reconozco -y así se lo hice saber- que no respondió nada convincente.
En mi opinión a la hora de hablar de las bolsas hay que conocer bien su historia y comprender los movimientos del mercado dentro de un ciclo, y esto demuestra que los aspectos técnicos muestran la realidad del mercado mucho antes de que los fundamentales sean capaces de reflejarla. Los precios de las acciones son un mecanismo de descuento y no engañan a nadie (como sí se puede hacer con los fundamentales con diferentes “trampas” contables).
Digo esto, porque el aspecto técnico de las bolsas europeas sigue siendo muy negativo, tanto que invita a pensar que algo huele a podrido dentro de la economía europea.
A los lectores de este portal, es una situación que no les pillará por sorpresa, ya que desde hace meses venimos hablando de la debilidad técnica que muestran en líneas generales las bolsas europeas, por lo que actualmente gran parte de los mercados europeos de renta variable son destinos nada atractivos para las inversiones.
Como siempre, la mejor forma de ver reflejado sobre el gráfico el pobre aspecto técnico de la renta variable europea es acudir al promedio EuroStoxx 50.
El promedio europeo se sumió en la debilidad en el pasado verano de 2017 y desde entonces muchos índices europeos no han sido capaces de evitarla (como por ejemplo la propia renta variable española). Esto significa que cuando la renta variable global sube, la gran mayoría de bolsas europeas suelen estar entre las que menos suben o incluso acumulando caídas. En cambio, cuando la renta variable global cae, las bolsas europeas suelen estar entre las que más caen. Mal negocio.
Esta debilidad técnica está llevando a varios índices europeos a establecer nuevos mínimos anuales durante esta semana, síntoma inequívoco de que el mercado de valores del viejo continente está causando muchos más disgustos que alegrías a sus accionistas.
Es una situación que hay que manejar con mucha cautela, ya que ante las crecientes probabilidades de que estemos a las puertas de un cambio de ciclo durante los próximos meses, los mercados débiles como los europeos tienen todas las papeletas para acusar un mayor sufrimiento. Mi postura al respecto ya la conocéis: Mientras los mercados europeos sigan débiles y bajistas nuestras inversiones deberán mantenerse alejadas de ellos.
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Buenos días Ricardo. Aunque no tenga mucho q ver con tu artículo, Me podrías explicar porque tengo la sensación de que cada vez q un valor va a subir al Ibex las semanas anteriores sube con fuerza, y una vez q ya está dentro del Ibex, suelen caer bastante?
Muchas gracias
Buenos días Jesús.
Tal vez se deba a la presión compradora de fondos indexados para ajustarse a las nuevas composiciones del índice al que replican. Una vez todos los fondos indexados lo tienen en cartera esa presión compradora desaparece y el precio se ajusta. Es un aspecto a estudiar cuantitativamente que tengo pendiente.
Un saludo!
Muchas gracias, estoy de acuerdo contigo.
Saludos
Ya nos informaras de tu estudio