La última de Robocop 25: Mover 1.400.000.000$ en un segundo

¡Ya estoy de vuelta! Es increíble la cantidad de cosas que se pueden acumular por “desconectar” un día del blog, pero bueno, poco a poco iremos retomando la normalidad.

Antes de nada, tal y como me habéis pedido por Twitter, os hago llegar un breve Feedback de la película “El lobo de Wall Street”, una película que ayer pude ver gracias a la invitación de la productora Universal Pictures. Como bien comentaba el amigo Javier Alfayate (autor de accionesdebolsa.com) esta mañana por Twitter, estamos ante el clásico estereotipo sobre los “stock brokers”, es decir, se buscan los extremos llamativos para captar la atención del espectador, pero obviamente, este tipo de situaciones no son así en la vida real (la excepción no hace la norma).

Por extraer alguna analogía con la “vida real”, os diré que la principal conclusión que podemos extraer es que si alguien pasa de ser una persona de perfil medio a ser una persona muy, pero que muy rica en poco tiempo es por una de dos, o por un golpe de suerte, o porque está haciendo algo extraño, probablemente fuera de la legalidad. Este perfil se acentúa más si dicha persona llega a ser tan rico que desprecia el dinero.

Obviamente, considero a la sociedad lo suficientemente inteligente como para entender que el mundo de los mercados no es tal y como se refleja en la película, siempre hay alguna excepción, pero bueno, como todo en la vida.

Si queréis reíros y pasar un buen rato (hay escenas en las que realmente te partes de risa), el film es una buena opción para distraeros una tarde del fin de semana. Ahora bien, de ahí a buscar analogías con la vida real hay un buen tramo.

Dicho esto vamos al mercado. Como sabéis, desde hace meses seguimos de cerca las aventuras de un robot de alta frecuencia al que “cariñosamente” decidimos bautizar con el nombre de Robocop 25.

Entre sus “hazañas”, encontramos que fue capaz de destrozar 30 mil millones de dólares en menos de un segundo, llevar a empresas cotizadas a no valer nada en siete segundos, o lo que es su récord hasta el momento: hacer desaparecer 45 mil millones de dólares en 45 milisegundos.

Este año ya se estrenó con Engility Holdings Inc, una empresa con una capitalización bursátil de 620 millones de dólares a la que hizo caer un 12% en apenas 1 segundo para recuperarse al segundo siguiente. En la jornada de ayer apuntó más alto, ya que se puso a jugar con Salesforce.com una empresa con 36.000 millones de capitalización.

El suceso tuvo lugar ayer a las 15:31 hora española, es decir, justo después de la apertura de Wall Street. Para ser más exactos a las 15:31:22″ cuando el valor pasó de los 57,63$ a los 59,71 en apenas un segundo, para al segundo siguiente volver al punto de origen. En un valor de este tamaño, este movimiento supone que en un segundo, la capitalización bursátil se movió unos 1.400.000.000$ (lo que solemos llevar para comprar el pan ¿verdad?

El siguiente gráfico representa ese momento en velas de un segundo.

Para ver más en detalle lo acontecido en ese largo periodo de tiempo (en escala de alta frecuencia un segundo podrían ser años para los humanos), vamos a recurrir a un gráfico de ticks. Recordad que cada tick supone una operación ejecutada, es decir, estamos ante el gráfico más detallado que se puede obtener, ya que representa todas las órdenes ejecutadas en el mercado.

Justo antes del movimiento, hubo una orden enorme de casi 15.000 títulos (la media a esa hora venían siendo unos 200), lo que a el precio de ese momento supone una operación de casi un millón de dólares.

No podemos saber si esa orden fue ejecutada por el algoritmo, pero resulta cuanto menos llamativa, y más si un segundo después el precio volvió al punto de origen como si nada hubiera pasado.

Como curiosidad, el máximo de ese movimiento (57,92$) coincidió exactamente con el cierre del valor en la jornada de ayer. ¿Simple casualidad?

¿Cuál será la siguiente víctima de Robocop 25? La respuesta en unos días…