Desde hace meses, venimos comentando desde estas líneas el buen comportamiento de las empresas tecnológicas en los mercados. Este liderazgo de la tecnología en los mercados de valores mundiales tiene repercusión en diferentes ámbitos y, por ello, esta semana quería profundizar en el aspecto técnico de una de las bolsas mundiales más dependientes de la tecnología.
En concreto nos detendremos en el mercado de Taiwán, un mercado que, como podéis ver, dentro del ranking de esBolsa.com se sitúa entre las bolsas más fuertes del mundo.
El mercado de valores de Taiwan lleva meses en la parte noble de nuestro ranking, circunstancia que se ve reflejada en una muy favorable situación técnica.
Como muestra el gráfico, el mercado de Taiwán no escapó de los retrocesos del mercado entre febrero y marzo de 2020. Ahora bien, en la segunda mitad de 2020 logró reestructurarse al alza llegando a consolidarse como uno de los mercados más fuertes del mundo.
¿A qué se debe que este pequeño mercado se haya situado entre los líderes del mundo? La respuesta la tenemos en que la economía de Taiwán es altamente dependiente del sector tecnológico, de hecho, este sector acapara actualmente un 56,55% de la capitalización bursátil del mercado de valores de Taiwán. Las principales empresas de Taiwán son proveedores de componentes y aplicaciones para las compañías tecnológicas más importantes del mundo.
El siguiente gráfico muestra la increíblemente estrecha correlación existente entre el ETF Technology Select Sector SPDR Fund (ticker XLK:US), compuesto por las 70 empresas tecnológicas más importantes del mundo (línea negra) y el mercado de Taiwán (línea roja) en los últimos años. Para eliminar el sesgo divisa y hacer una comparativa de igual a igual en este caso el mercado de Taiwán se representa en términos de dólares estadounidenses en lugar de en su divisa local.
La correlación entre el comportamiento de las principales empresas tecnológicas y la bolsa de Taiwán es muy alta. No hay duda que mientras las empresas tecnológicas sigan funcionando bien en los mercados, la bolsa de Taiwán seguirá dando alegrías a sus accionistas. Ahora bien, la gran dependencia de este mercado a un único sector hace que el riesgo a invertir en este tipo de países sea grande, ya que, mientras todo funcione correctamente, las alegrías ocultarán los riesgos de dependencia, pero en el momento en que haya algún escenario adverso el margen de maniobra de este mercado podría ser escaso en comparación a otros mercados cuya dependencia sectorial esté más diversificada.
A la hora de invertir en emergentes nunca hay que olvidar que estos mercados, por sus características tanto socio políticas como económicas, dotan a las carteras de un riesgo adicional con respecto a países desarrollados. Este riesgo hace que elevadas exposiciones a mercados emergentes puedan aumentar la volatilidad de las carteras, no siendo aptos para todos los inversores.
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