La semana pasada hablamos largo y tendido sobre la mejoría de muchas bolsas del viejo continente, y hoy lunes, volveremos a centrar la atención sobre otra de las grandes plazas bursátiles europeas que recientemente se ha puesto interesante.
Tal y como explico en mi libro “El código de Wall Street” siempre debemos de estar en el lado de los mercados ganadores, es decir aquellos que sean fuertes (rinden a un ritmo superior que la media) y alcistas, puesto que apostar por los ganadores siempre es algo que nos beneficia en nuestras inversiones.
Al lado de estas líneas podéis ver el gráfico del índice CAC 40 francés (ticker PXI) cerrando en nuevos máximos multianuales la semana pasada.
La bolsa de Francia, opera con una pendiente de la media móvil de 30 semanas alcista, lo que indica que este mercado ahora mismo mantiene un sesgo alcista de medio plazo.
El indicador RSCMansfield que mide el desempeño relativo del índice, nos dice que desde mayo de 2014, era débil, es decir, la bolsa francesa iba a “remolque” de otras bolsas internacionales más fuertes.
Esto es algo que podría haber cambiado esta pasada semana puesto que a cierre semanal el índice francés logra cerrar con un RSCMansfield positivo. Por lo tanto estamos oficialmente ante un mercado que es fuerte y alcista, en el que merece la pena empezar a buscar oportunidades de inversión puesto que sus componentes tienden a premiar a los inversores con alzas superiores a las de la media del mercado.
La mejoría del mercado francés, dado el gran tamaño de esta plaza bursátil abre otra gran ventana de opciones de inversión en Europa.
