Con los mercados de valores americanos paralizados totalmente por el huracán Sandy, dirigimos nuestro punto de vista al cierre de otras bolsas internacionales que sí funcionan con normalidad. Me gustaría hacer una parada en el mercado chileno cuyo aspecto ahora mismo está empezando a ser cuanto menos preocupante.
Hace algunas semanas ya mostraba mi preocupación por esta bolsa latinoamericana, y lo cierto es que cada vez su aspecto pinta peor. De hecho, la única nota positiva que podemos tener es que la tendencia global se mantiene alcista, con lo que los movimientos bajistas en las bolsas tienden a ser bastante menos dramáticos (aunque siempre hay excepciones), razón por la que insisto tanto en que no merece la pena jugársela con los cortos en mercados alcistas.
Lo que más me preocupa del aspecto técnico del IPSA chileno es que no logra escapar de esa cada vez más acentuada tendencia lateral-bajista que sostiene desde marzo de este año. Un hecho que se suma a la debilidad que mantiene desde principios de 2011 y que en mi opinión lo hace un mercado nada interesante desde entonces.
El precio ahora mismo está impactando contra la media móvil de 30 semanas que actúa como resistencia dinámica. En caso de perderse el soporte reseñado con la línea discontinua el aspecto empeoraría muchísimo.
Si por la razón que sea, finalmente el índice rompiese al alza, la tormenta pasaría de largo al menos por el momento, pero no quería dejar pasar esta oportunidad para advertir a los inversores que a diario nos visitan desde ese país, que si el índice pierde soportes, podría sobrevenirse un movimiento violento tal y como nos alerta el indicador Atlas.
¡Buenas noches inversores!
