Uno de los puntos a los que más atención hemos prestado en los últimos meses es la debilidad relativa que se ha apoderado de las bolsas europeas. Hace meses ya comentábamos por aquí que preferíamos tener una menor exposición a Europa por su mal comportamiento relativo. Para todo el que no lo sepa, un mal comportamiento relativo indica que cuando la renta variable global sube, Europa sube menos, y cuando la renta variable global sufre, Europa sufre más.

Como sabéis, uno de los aspectos en los que más insisto es que debemos de estar siempre del lado de los mercados que mejor se comporten, ya que nos permitirá sufrir menos en las naturales épocas de caídas dentro de tendencias alcistas como la actual, y ganar más cuando las alzas se recuperen.

El gráfico que podéis ver al lado de estas líneas corresponde al EuroStoxx 600, compuesto por las 600 compañías más importantes de Europa. La amplia representatividad de este índice nos permite observar de forma conjunta el comportamiento de la renta variable en Europa, y su gráfico refleja la debilidad generalizada sobre la que hemos hecho hincapié en varias ocasiones.

Guste o no guste, la realidad es que en general las bolsas europeas lo hacen peor que las americanas, de hecho, Islandia e Irlanda son a día de hoy las únicas plazas europeas capaces de mantenerse más fuerte que los yankees.

No debemos perder nunca de vista que a día de hoy el mercado europeo se comporta peor que la media, y por lo tanto nuestra exposición a mercados débiles debe mantenerse reducida hasta que no vuelvan a ganar fuerza. No olvidéis nunca que si invertís en mercados fuertes los resultados tenderán a ser más positivos que si invertís en mercados débiles.

Recuerda que toda la metodología de inversión así como la confección de la plantilla de análisis viene explicada en detalle en mi libro “El código de Wall Street”.