“Los Bancos Centrales y aquellos que dictan las políticas económicas no pueden dejar de interferir” Para no cebarse con ellos, Albert Edwards de SocGen admite que la presión pública para no quedarse de brazos cruzados cuando se enfrentan a malas noticias económicas es abrumadora.
La opinión pública, y mas concretamente, el electorado, claman a las autoridades de política económica para que hagan frente a los graves problemas económicos. Cualquier sugerencia del estilo de la “escuela austriaca” (que defiende que es mejor dejar que el ciclo se agote) es ridiculizada como derrotista. Algo puede y debe hacerse siempre. El que la intervención vaya a empeorar la situación en el medio y largo plazo es un inconveniente que se puede ignorar hasta que llegue el momento (lo que en castellano conocemos como patada hacia delante).
A la vista del gráfico superior cuyas zonas grises reflejan las crisis financieras, no queda otra que compartir la frustración de Edwards quién afirma que “derrama lágrimas de desesperación cuando recuerda la incompetencia de nuestros confiados políticos, cuyas intervenciones a pesar de sus mejores intenciones, parecen generar nuevas crisis financieras cada vez con mayor frecuencia”.
Fuente parcial: ZeroHedge