Sin ningún género de dudas Reino Unido ha acaparado la atención mediática internacional en las últimas semanas. El Brexit, la dimisión de David Cameron, quién será su sucesor y un sinfín de titulares llenan las noticias de los periódicos de información internacional.

No obstante, como ya he reiterado en muchas ocasiones nuestra atención como inversores está en los gráficos y no en las noticias. Los gráficos reflejan los movimientos de los precios y es precisamente el precio siempre el que tiene la última palabra en todo. No olvidéis que más allá de cualquier noticia, el precio es el que nos hará ganar o perder dinero. Por muy positivas que sean las noticias, si la tendencia del precio es bajista, perderemos dinero. Además de esto, las noticias siempre tenderán a explicar la evolución de los precios a posteriori, resultando de escasa utilidad para el inversor.

Y es precisamente en el gráfico del FTSE 100 londinense donde como inversores tenemos el que para mí es el suceso más importante del panorama bursátil británico. Tras muchos meses de debilidad y tendencia bajista, la bolsa de Reino Unido ha confirmado esta misma semana que se une a los mercados con mejor comportamiento del mundo, recuperando su tono alcista y su fortaleza.

El indicador RSCMansfield que mide el desempeño relativo del índice, nos dice que tras muchos meses de debilidad, el índice británico ha logrado cerrar la semana con un RSCMansfield positivo. Por tanto, en medio del ruido generado por el Brexit estamos ya oficialmente ante un mercado fuerte y alcista, en el que merecerá la pena empezar a buscar oportunidades de inversión (mientras se mantenga fuerte y alcista) puesto que los valores ingleses tenderán a premiar a sus inversores con alzas superiores a las de la media del mercado.

Antes de lanzarse a comprar en el mercado británico hay que tener en cuenta que las compras en la bolsa de Londres sobre valores ingleses están sujetas Stamp duty, un impuesto que graba la compra de títulos ingleses con el 0,5% del importe de la compra. Dentro de nuestro método es un factor importante que los costes en comisiones más otros gastos como este tipo de impuestos no superen el 1% del importe de la operación, por lo que es un factor a tener en cuenta.

Con la confirmación de esta mejoría en el mercado británico ya podemos poner a trabajar nuestros rastreadores este fin de semana en busca de los valores que cumplan los criterios de nuestro método.

No olvidéis tampoco que la inversión en valores de Reino Unido nos lleva a exponernos a la Libra Esterlina (las acciones de allí están denominadas en Libras obviamente). Dada la volatilidad de la Libra debemos valorar la posibilidad de cubrir la divisa, puesto que si no sufrimos el riesgo de que el efecto cambio juegue en nuestra contra y lastre las plusvalías.

El capítulo 13 de mi libro está dedicado íntegramente a enseñaros cómo cubrir de forma sencilla la divisa a la hora de invertir en áreas geográficas diferentes a nuestra divisa base (en nuestro caso el euro). De esta forma, podemos invertir en todo el mundo sin preocuparnos del efecto cambio.

Toda mi metodología de inversión viene explicada en detalle en mi libro “El código de Wall Street”. 

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Los análisis aquí expuestos son opiniones estrictamente personales, no recomendaciones.