El precio del petróleo continúa con sus retrocesos situándose por debajo de los 30 dólares por barril. Como resultado, el coste de un galón de gasolina (precio que se utiliza como referencia en las gasolineras de EEUU) ha disminuido en el entorno de un 70% en los últimos ocho meses.

Como no cabe duda que los precios del petróleo están en boca de todos, he preparado un gráfico que ofrece una perspectiva de largo plazo sobre los precios de la gasolina en los surtidores de EE.UU. Para disponer de una perspectiva real, el precio ha sido ajustado a la inflación partiendo los datos desde el año 1976.

Hay varios aspectos. Por un lado, las crisis geopolíticas (señaladas con recuadros rojos sobre el gráfico) como cabría esperar han venido ligadas frecuentemente grandes oscilaciones en el precio de la gasolina.

También vale la pena señalar un aspecto muy importante, y es que la última vez que hubo una guerra entre productores que causó un exceso de oferta (mediados de los 80 con en el conocido como “Contra-choque petrolero), los precios de la gasolina se mantuvieron en un nivel relativamente bajo durante casi dos décadas. Es decir, aunque ahora mismo nos cueste mucho de imaginar porque en los últimos años nos hemos “acostumbrado” a convivir con precios del combustible que tendían a sostenerse en niveles elevados, los precios del combustible podrían pasar ahora a situarse perfectamente en niveles mucho más moderados durante un gran periodo de tiempo.

Me llama bastante la atención las declaraciones de altos ejecutivos de empresas petroleras y otras personas ligadas al negocio del petróleo en todo el mundo afirmar día tras día en cada una de sus apariciones ante la prensa (más frecuentes de lo habitual por cierto) “que los precios del petróleo han tocado suelo y que los precios van a subir de nuevo a los niveles anteriores o incluso todavía más altos”.

Son las típicas afirmaciones de quienes tienen intereses en el negocio, obviamente son declaraciones con un claro sesgo. En mi opinión no debemos dejar de lado que no sólo pueden caer los precios del petróleo (tal y como ha sucedido en los últimos meses), también cabe la posibilidad de la que nadie habla, y es que pueden permanecer bajos y estables durante un período muy largo de tiempo, y la historia lo ha demostrado.

Es cierto que en España estos descensos se trasladan en menor medida al precio de los surtidores puesto que gran parte del coste del combustible corresponde a impuestos, no obstante, dado que seguimos en un ciclo que tiende hacia la deflación (invierno de Kondratiev explicado en mi libro), no podemos descartar en absoluto que después de varias décadas de precios del combustible con tendencia a los repuntes, la situación se mantenga en niveles más reducidos durante varios años como sucediese durante gran parte de los 80 y 90.

Recuerda que los ciclos económicos y sus repercusiones sobre los activos cotizados vienen explicados en mi libro “El código de Wall Street”.