Plata: siguiendo el guión.

En repetidas ocasiones, a lo largo de los últimos meses, he hablado en este blog sobre la importancia de no centrarse sólo en las acciones como activo inversor. Una fea costumbre que, por desgracia, está muy arraigada en la mayoría de inversores de nuestro país.

Una buena diversificación es clave para nuestra cartera en momentos tan complicados como el actual. A diario recibo consultas sobre valores, pero rara vez me piden algo sobre bonos, acciones o divisas, y creo que este es un chip a cambiar.

Hay ciclos en los que funcionan mejor las acciones; otros, ideales para materias primas; y algún que otro momento es bueno para los bonos. Incluso, hay veces, que dos de esos tres activos serán buenos compañeros para obtener rentabilidad sin olvidar a las divisas.

En este mundo, eso de comprar y olvidar no es una buena estrategia como norma general, y debemos de tener un mínimo de sentido común y conocimiento a la hora de depositar nuestros preciados ahorros en cualquier tipo de inversión. Saber qué y porqué lo hacemos, es de vital importancia si se quiere sobrevivir en este duro negocio.

Todo esto lo digo porque me alegra mucho ver como varios lectores, comprendiendo el hecho de que las acciones se mueven en un angustioso lateral, se han lanzado a la búsqueda de otras opciones, como la plata, que planteábamos hace tres semanas aquí. Cierto es, que todavía no debemos lanzar las campanas al vuelo, porque no tenemos nada ganado, ya que esperaremos a un cierre semanal con una rentabilidad igual o superior al 10% para asegurar parte del beneficio, pero sí que podemos decir que la operación va bien encaminada.

A petición de algunos lectores, hoy voy a hacer un repaso al gráfico de la plata, pero antes analizaremos el dollar index, sin duda pieza clave en el devenir de las materias primas.

Dollar index ($USD):

Todavía recuerdo en el mes de junio, chateando y analizando ciclos deflacionarios con el compañero Javier Alfayate, le comentaba que si los “mandamases” querían evitar una deflación real que ya estaba siendo descontada por el mercado, tendrían que empezar a debilitar el dólar y estimular las materias primas. Justo eso es lo que están tratando de hacer, y por suerte, de momento parece que han aprendiendo de errores pasados, y están tomando medidas para evitar la llegada de un catastrófico escenario deflacionista real, hecho que despertaría viejos fantasmas enterrados tras la gran depresión.

Desde que están dejando caer el dólar, es imposible no darse cuenta de los ascensos en materias primas agrícolas, la finalidad no es otra que subir precios de algunas materias primas, para espantar de forma cautelosa esos fantasmas deflacionarios que asomaban por los mercados, tratando así de sentar las bases para una recuperación lenta y sostenida.

¿Lo conseguirán? Pues no lo sé, lo que sí sé, es que, con la voluntad de mantener un dólar débil, materias primas ganadoras del ciclo como los metales preciosos se pueden ver muy beneficiadas, y lo que ahora parece “caro” puede terminar siendo más “caro” y nosotros trataremos de sacarle partido a este tipo de operaciones que como bien sabéis son mi debilidad.

Silver future (SIXXXX):

La fuga ya está plenamente confirmada.  Estamos en una subida libre de las que a mí me gustan. Comenté en la entrada en la que planteaba la operación, que al entrar en subida libre, seguramente el volumen aumentaría, y así ha sido. No de forma espectacular, pero sí que se nota un aumento de interés inversor, un detalle que, sin lugar a dudas, nos beneficia.

A todo esto le sumamos que el dinero inteligente se ha subido al “tren alcista” con nosotros, y esto facilitará mucho las cosas de cara al futuro, puesto que con ellos al frente, la volatilidad suele ser más reducida que si la nave es comandada por la influenciable mano débil.

Solo me queda comentar que el stop profit lo pondré cuando el cierre semanal de la plata sea superior a los 21,84$, precio que superaría el 10% de beneficio en la operación.

Mientras tanto, no olvidéis que lo ganado o perdido siempre es el precio del stop, y que aquí por muy bien que pinte la operación, nunca hay que cantar victoria.