Mientras que las agencias de calificación siguen rebajando sus calificaciones y perspectivas de los países emisores de deuda soberana europea, los inversores parece que siguen tomando posiciones en deuda del viejo continente. Como ejemplo, los amigos de BespokeInvest ponen a España.
El verano pasado, los operadores no podían colocar deuda lo suficientemente rápido a medida que los diferenciales de la deuda soberana española a 10 años se ampliaron a más de 600 puntos básicos (pb) por encima de los bonos alemanes a 10 años. Ahora, menos de un año más tarde, los diferenciales de la misma deuda española se han reducido en más de un 50% hasta 294 bps. Esto representa el nivel más bajo desde diciembre de 2011.
Curiosamente, en la actualidad la deuda española se encuentra en niveles de finales de 2011 justo cuando estalló la crisis de MF Global donde se hizo público que no podía soportar más sus apuestas sobre la deuda europea (seguro que ahora se están tirando de los pelos al ver esta mejoría cuando ellos ya han caído).