Llevamos semanas hablando de la deflación, y de un mercado caro en relación precio/dividendo, pero no hemos comparado todavía los tres grandes ciclos deflacionistas entre sí, para generar una analogía y ver más claramente lo que ha sucedido y lo que podría suceder.
El gráfico que vamos a ver hoy, es fruto del inestimable trabajo de Doug Short, un apasionado de los mercados, y que dedica el tiempo libre de su jubilación a realizar y compartir estos gráficos tan interesantes, y que nos pueden resultar de mucha utilidad.
Como ya sabéis, el ciclo secular deflacionista en el que nos encontramos empezó en el año 2000, y en 1998 tuvimos el aviso de lo que se acercaba, cuando los bonos y los mercados empezaron a desajustarse. Podéis leer más sobre esto aquí
El ciclo deflacionista japonés, tiene su origen en la burbuja que se produjo en los precios de los inmuebles y las acciones durante los años ochenta, y que estalló de forma progresiva en los primeros años noventa. El derrumbe de los precios, provocó un largo periodo de crecimiento económico muy reducido, caracterizado por el exceso de capacidad y la falta de confianza en el futuro económico del país, y que se complicó con la caída brusca de la inversión privada y sus repercusiones en el sector bancario.
Y el tercer gran ciclo deflacionista, a comparar con la actualidad, es la gran depresión. Como todos conocéis, comenzó alrededor de 1929, y se extendió hasta finales de la década de los años treinta o principios de los cuarenta, dependiendo del país que tomemos como referencia.
La plantilla que veremos a continuación, está ajustada a la inflación de los tres mercados bajistas seculares. En ella, se alinea el máximo del SP500, antes del estallido de la burbuja tecnológica en marzo del año 2000, junto al máximo del Dow Jones en 1929 y el máximo del Nikkei 225, en el punto álgido de la burbuja de 1989.
Como veis, la analogía de los tres mercados bajistas seculares está en consonancia a mi escenario de mercado lateral-bajista durante los próximos años, esto permitirá el ajuste del ratio precio/dividendo que actualmente sigue muy caro.
Sé que dentro de cada uno de nosotros esperamos que esto no pase, pero las relaciones del ciclo económico y sus componentes (bono, bolsa, materias primas y dólar), siguen indicando que estamos dentro de un ciclo deflacionista, y tenemos que operar en consecuencia. Es absurdo hacer oídos sordos a un mercado que grita deflación a los cuatro vientos. La pista más clara viene de la mano de los bonos que siguen haciendo máximos, gracias al dinero que busca seguridad y refugio en ellos, algo típico de estos ciclos, junto a la subida de los metales preciosos por el mismo motivo, miedo y busca de refugio.
Los tiempos difíciles siguen en pie, y el día que la normalidad vuelva aquí lo escribiré, pero mientras esto no suceda y siempre hablando a medio-largo plazo, las mejores opciones de inversión pasan por los bonos y los metales preciosos.
Para finalizar, me gustaría hacer alusión a algunos e-mail recibidos atacando a esta “teoría”, basándose única y exclusivamente en el rebote de las últimas semanas. Creía haber dejado claro que un análisis de ciclo secular es a medio/largo plazo, y no a días vista. Lamento si no he sido claro en este aspecto.
Primero decir que cada día me gusta mas este blog, coincido con la teoría de que asistimos a un ciclo deflacionista de medio largo plazo. Soy seguidor del sistema Weinstein, pero opero exclusivamente con fondos de gestoras que pertenecen a mi circulo de confianza, por eso estoy largo en metales y bonos y corto en acciones a traves de indices.
Por ello me extrañaba que en un post anterior se recomendase cortos en plata.
Muchísimas gracias Maguri.
El tema de la plata es algo que nadie me ha preguntado y me encanta que lo saques.
Como recordarás la operación de la plata se abriría solo si se perdiese un importante soporte que traería consigo un cambio de tendencia, finalmente no se perdió y el precio sigue su camino.
El quid de la cuestión estaba en ese stop y los argumentos técnicos que ahora han cambiado. En la fecha de aquel análisis la mano fuerte estaba liquidando y el soporte estaba en serio peligro, la ruptura del cual habría tenido consecuencias en los subyacentes que dirigen el mercado, puesto que habría sido acompañada también por el oro.
Aquella estrategia buscaba un cambio que finalmente no se dio, por eso que no llegó a entrar la orden y el precio regresó a su tendencia normal.
Un saludo.
Respecto a la plata, tambien en aquel entonces, el dolar parecía que podía frenar su caida, lo cual sin duda no habría permitido el salto arriba que han dado la mayoría de las materias primas.
La operacion de la plata a mi tambien me gustaba, planteada en ese momento.
Así es timbaler, la clave estaba en ese momento…lo que podría suceder no sucedió quedando invalidada la operación (recuerdo que era una orden stop venta que el precio no llegó a tocar).
Ahora mismo queda obsoleta y apenas disfruta de argumentos técnicos. Miraremos a otros lugares 😉
Un saludo!
Lo cierto que yo soy fiel a mi estrategia, pero ese post me hizo dudar. En cualquier caso yo no pensaría en cortos en metales especialmente oro y plata.
Ahora ya no, como te he dicho la operación quedó sín argumentos y por eso no entró 😉